Aquel drama rural, pasional y tierno, con un guión, fotografía y montaje maravillosos, nos sigue fascinando veinte años después. Destaca la actriz Gong Li.
Un gran director, quinta generación del cine chino, que fue director de fotografía y actor, antes de conseguir el éxito por Sorgo Rojo.
Acierto visual impactante, contando una historia de contenidos trágicos clásicos. Una tintorería rural en los años veinte. En ese escenario el color y el movimiento se acompasan con las conductas humanas: amor y odio; egoísmos y altruismos; impotencia y pasión, ternura, angustia...
Cine en estado puro. La historia se cuenta con los recursos propios del medio. Lirismo y drama en una cultura local, ajena y en apariencia distante, pero que en realidad está repleta de valores universales. Una de esas películas que tienen la prestancia de obra maestra y que desde Venus y Janóbriga invitamos a todos nuestros amigos a su revisión. ¡ Que aproveche !
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